Existen trabajos que, inevitablemente, hay que ejecutarlos en las alturas y, por tanto, requieren de maquinaria para la elevación del personal. Trabajos como obras, construcciones, reformas de fachadas u otros relacionados con la poda de árboles, que implican un cierto nivel de riesgo. Para esas labores se utilizan distintos tipos de plataformas elevadoras.
Hay varios tipos de máquinas y plataformas elevadoras para que los trabajadores puedan realizar sus tareas de forma cómoda y segura, independientemente de la altura. A lo largo de este artículo, te vamos a mostrar los tipos de plataformas elevadoras que existen y sus características principales para elegir la que mejor se ajuste a tus necesidades.
Desde hace tiempo, la normativa sobre prevención de riesgos laborales obliga a las empresas a adoptar importantes medidas de seguridad en trabajos en altura, como obras, construcción, trabajos industriales o reformas, entre muchos otros.
¿Qué es una plataforma elevadora?
Se trata de una máquina móvil que permite desplazar al trabajador hasta una posición elevada. Está pensada para uso industrial y facilita la libertad de movimiento de los trabajadores, mediante varias estructuras extensibles y chasis.
Una plataforma elevadora puede subir, bajar o mover de un lado a otro al operario junto con sus herramientas de trabajo y el material necesario para ejecutar sus tareas. Esta máquina no solo permite al operario realizar su trabajo de una forma mucho más segura y cómoda, sino que le ofrece una amplia libertad de movimientos.
Partes de una plataforma elevadora
A la hora de elegir la plataforma elevadora más adecuada para tu trabajo, es conveniente tener en cuenta una serie de aspectos, como el lugar, la superficie, el entorno y la ubicación, así como las características del trabajo que hay que hacer. Además, hay que tener en cuenta las ventajas y limitaciones que ofrece cada máquina.
Esto hace imprescindible contar con el apoyo y asesoramiento de nuestro equipo de expertos que te ayudarán a escoger la plataforma elevadora en alquiler que mejor se ajuste a tus necesidades.
Una plataforma elevadora está compuesta de varias partes:
Una plataforma o cesta: está rodeada de una barandilla con rodapiés para garantizar la seguridad evitando caídas, y un panel de control desde donde el operario controla la altura de la máquina, su ángulo, posición y velocidad.
Estructura: es una estructura extensible unida al chasis que permite elevar la plataforma a distintas alturas sobre la que trabaja el operario.
Chasis: es el elemento que permite el desplazamiento de la plataforma, aunque ésta puede ser autopropulsada, empujada o remolcada.
Actualmente, existen en el mercado plataformas elevadoras muy sofisticadas, que pueden alcanzar alturas de hasta 58 metros. Esto les permite sustituir los peligrosos andamios o estructuras en suspensión en diferentes trabajos, garantizando la seguridad de los trabajadores en tareas de mantenimiento de fachadas, reparación de ventanas, limpieza o poda de árboles.
La principal ventaja de las plataformas elevadoras frente a otras estructuras de elevación es que aumentan la productividad del trabajador, al mejorar su movilidad y la eficiencia, al tiempo que agiliza el trabajo. En consecuencia, estas máquinas son más seguras y resultan más económicas para las empresas.